viernes, 5 de diciembre de 2008

Una Piedra en el Zapato



En una piedra en el zapato se ha convertido para el FMLN la ley de amnistía que se decreto el 20 de Marzo de 1993 para olvidar o perdonar la responsabilidad material o intelectual a todos los autores de crímenes políticos y comunes que se cometieron durante la guerra civil que por mas de 12 años desangro a El Salvador.
A 15 años de firmada la ley y con unas elecciones a las puertas en donde realísticamente se puede dar un triunfo del Frente, el debate se centra en la conveniencia de discutir su derogatoria. En el pasado el FMLN abogo por que la ley de amnistía fuera derogada.

Para los entendidos, la aplicación de esta ley fue una pieza clave que viabilizo la firma de los acuerdos de paz y actualmente su posición es que seria contraproducente su derogatoria para que el proceso de “reconciliación” siga su curso. Es mas, el mismo candidato presidencial del FMLN ha dicho que hacerlo seria como abrir viejas heridas y dijo categóricamente que de ser electo, el ejecutivo no pedirá su derogación.

En el pasado yo he hablado de la necesidad de que la izquierda se modernice, he interpretado la elección de Funes a la candidatura presidencial, como una señal del rompimiento de su dogmatismo y como una apertura hacia otros sectores de la sociedad, inclusive los de la empresa privada progresista.
Pero también he advertido acerca de la “derechización” de la izquierda, de sucumbir a la adaptación de ideas “curita”, del peligro de abandonar sus principios por pelear en la “arena” politiquera.

Creo que los familiares directos de las victimas de los asesinados políticos de ambos bandos, así como la sociedad en general tienen derecho a que se les compense material o moralmente o ambos, cual sea el caso, para que haya una verdadera reconciliación. No se trata de realizar una “caza de brujas” o poner en la cárcel a los criminales materiales o intelectuales del pueblo (salvo los criminales de lesa humanidad) si no de saber la verdad, de dignificar a las victimas, de saber como y por que fueron asesinados injustamente.

Considero que la derogatoria de la ley de amnistía abonara a la construcción o reforzamiento de la inteligencia emocional de la sociedad salvadoreña, a la maduración de su proceso de reflexión, a su verdadera catarsis y por que no decirlo, a su capacidad de perdón.

Saquémonos esa piedra del zapato para poder caminar sin dolor hacia una verdadera reconciliación.

5 comentarios:

Unknown dijo...

Personalmente coincido en algunos puntos, el perdón y olvido son necesarios para solucionar o curar las heridas de la sociedad nuestra. Sin embargo, debemos saber a quien perdonar, que olvidar.

Por eso, no creo que debamos derogar la ley; pero si aclarar quienes hicieron que. Es decir que los culpables y responsables de las masacres, asesinatos y más sean expuestos, y perdonados. Y las victimas o sus familiares, compensados. En eso si estoy de acuerdo.

No creo que valga la pena encarcelar a nadie, a estas alturas.

Te invito a leer estos post en Frijolitos Salvadoreños

http://frijolitossalvadorenos.blogspot.com/2008/05/perdn-y-olvido-eso-necesita-el-salvador.html

y

http://frijolitossalvadorenos.blogspot.com/2008/04/quien-debe-pedir-perdn-en-el-salvador.html

Saludos
Moro
http://frijolitossalvadorenos.blogspot.com


Moro

nrp888 dijo...

El problema es que mientras la ley exista no se puede investigar , ni encausar a nadie, ese es el problema.

Si queremos que nuestra sociedad se desarrolle sin el temor al fantasma de la impunidad es necesario, al menos averiguar como pasaron las cosas y deducir responsabilidades y hablo de los 2 bandos.

Solo así se aprenderá de esta amarga experiencia, solo así podremos perdonar.

Leí los artículos del link que me dejaste y coincido con el espíritu del escrito, pero hay tanto que decir sobre este tema... Saludos Mauro!!!

PrOjwanac dijo...

Primero deseo felicitarlos por este blog, me parecen interesantes sus articulos.

ya en materia deseo opinar que no estoy de acuerdo en lo que afirmas que la ley de amnistía fue lo que viabilizo la firma de los acuerdos de Paz.

La amnistía fue un hecho posterior a la firma de los acuerdos de paz y fue un negocio entre algunos miembros del FMLN y Cristiani, con ella se negociaron tambien otros aspectos que habían quedado fuera de los acuerdos.

Una buena Ley de Amnistía en el marco de la Finalización del Conflicto Armado hubiera sido perdonar a los culpables de "crímenes de guerra" pero siendo ARENA el partido gobernante y cuyos miembros estaban involucrados en crímenes de "Lesa Humanidad", elaboró una ley amplia donde se perdonaron incluso delitos de "Cuello Blanco", peculado, etc.

La parte del FMlN Que apoyó esta amnistía salío despues de este partido, fue encabezada por JOAQUIN VILLALOBOS (ERP y RN) y posteriormente se dedicó a hacer otros negocios con el Gobierno, como el Fatidico pacto de San Andrés.

La parte del FMLN que se opuso a la Amnistía como fue redactada y a la línea de hacer negocios con el gobierno fue encabezada por SCHAFICK HANDALL y con él los miembros que se quedarón dentro del partido, luego de la salida del ERP y RN.

por lo anterior es que el FMLN institucional se ha opuesto siempre a la ley de Amnistía, este ha sido uno de los principios mas importante de la estructura partidaria así como de sus bases y simpatizantes, hasta que FUNES salió con la sorpresa de no seguir apoyando su derogatoria.

Ojalá que el partido tenga bien clara la estrategia para no renunciar a uno de sus más fuertes principios.

Ojalá FUNES no sea un simple administrador de un sistema caducado.

nrp888 dijo...

Yo he dicho que la ley fue una de las piezas claves para la firma de los acuerdos, o sea hubo otros factores claves y mas importantes tal vez, pero la amnistía fue lo que también se pacto. Es muy interesante lo que decís acerca de los crímenes de cuello blanco yo estoy 100% de acuerdo en lo que afirmas.

Gracias por tu participación pues me ha hecho pensar en otras cosas que se quedaron fuera del escrito.

Gracias también por las felicitaciones recibe muchos saludos!!!

Anónimo dijo...

vamos con todo rodrgio avila presidente del empleo