lunes, 27 de octubre de 2008

Remendando el Miedo


Hay días que se ahogan en su propia ausencia.
Días en que las ramas aúllan y espantan el viento.
Días en los que el sol amanece como un durazno podrido.
Hay días que se niegan a ser.
Y tú,
con la terca postura de un reloj descompuesto,
no dejas de tañer la misma campanada.
Algo así como enhebrar el miedo tras el ojo de una aguja,
te bastara tener la puntería de un águila?
será difícil,
cuando la resaca de nuestra crisis existencial te mengua las manos.
Más sin embargo,
es necesario remendar las heridas,
por que en la noche,
la sabana solo nos alcanza para abrigarnos del frió,
dejando la vergüenza a la intemperie.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Hé quedado atónita con tu pub´licación REMENDANDO EL TIEMPO. Qué vergonzoso que una persona externa o alejada de nuestras raices te haga recordar lo insignificante qué podemos ser.Mil Gracias.....por valorar a nuestro querido Pablo Neruda.

nrp888 dijo...

Gracias a ti por venir a apoyarnos aunque sea en "espíritu" Elena . A ver y cuando nos deja algo por estos lados.

nrp888 dijo...

Pablo Neruda es un poeta universal y uno de mis favoritos. Siempre lo leo con entusiasmo y contagiado de el me atreví a escribir esta breve reseña. Gracias por pasar Pamela.