Teníamos al tren Obama corriendo a todo su potencial para llegar puntual a la estación de la historia, demasiado tiempo se había perdido con las administraciones anteriores empecinadas en el estancamiento y en algunos casos moviendo el tren en retroceso. La mayoría del pueblo gringo confiaba en su nuevo conductor y lo había premiado con mayoría calificada en el congreso para asegurarle un trayecto sin mayores sobresaltos.
Una de las reformas que tocarían la neuralgia del status quo era sin duda la reforma al sistema de salud. Un sistema anacrónico y deficiente, que deja afuera a más de 43 millones de norteamericanos, un sistema que ha costado la bancarrota a miles de personas afligidas por enfermedades crónicas, un sistema en el vergonzoso número 37 en el
ranking mundial superado por países tan pequeños como nuestra vecina Costa Rica, un sistema de salud
extremadamente caro el número 2 en el mundo solo superado por Marshall Islands.
La reforma de la salud será una lucha encarnizada ya que toca un negocio de billones de dólares. Las compañías de seguros y droguerías están temblando del miedo por lo que se ha llamado aquí “La Opción Publica”. Esta alternativa será manejada por el gobierno ofreciendo un mejor cuidado a precios módicos lo que vendrá a romper el monopolio de las compañías de seguros privadas y a crear competencia.
Es tan fiera la pelea que la America’s Health Insurance Plans grupo que aglutina a estas compañías ha admitido que 50,000 de sus empleados están activamente participando en las reuniones comunales en contra de la reforma.
La estrategia utilizada es la de siempre “INFUNDIR TEMOR”. Se manejan mentiras como estas:
No tendrás derecho a decidir qué beneficios obtener, la verdad es todo lo contrario, tendrás muchas más opciones donde escoger y si te gusta tu plan actual puedes conservarlo.
El nuevo plan será Racionado, la verdad es que no hay mas racionamiento que en las actuales condiciones, una vez agotados los fondos asignados al plan que estas pagando te cobran todo a ti, además los planes actuales de salud no tienen una cobertura total.
El Nuevo plan intenta dar seguro gratis a los Inmigrantes Indocumentados, esta mentira tiene dos propósitos, dividir a la comunidad y atisbar el sentimiento anti inmigrante de cara a la futura reforma de la ley.
Se crearan Paneles de la Muerte que decidirán quién va a Vivir, lo que realmente sucederá es que el plan pagara por consultas voluntarias a personas que tengan una enfermedad terminal para que estos puedan discutir con su doctor acerca de su cuidado de salud en sus últimos días, como por ejemplo hasta cuando mantenerse en respiradores artificiales ,etc. Consultas que serán estrictamente voluntarias. Por ahí les andaban diciendo a los viejitos que a determinada edad los iban a poner en la cámara de gas, al mismo estilo de los nazis.
Estas y otras mentiras han estado circulando con vehemencia en las diferentes reuniones comunales por agentes pagados por las compañías de seguro privadas, ya se menciono que en un
artículo del Wall Street Journal , que habían dado órdenes a 50,000 de sus empleados para vocalizar su oposición a la reforma.
Lo que decepciona de los demócratas es que siempre los agarran con los pantalones abajo, se confiaron en la popularidad de Obama y no hicieron una campaña agresiva para vender la reforma. Los republicanos golpearon primero y ahora los tienen contra las cuerdas.
Los demócratas se olvidaron de atracarle leña a la locomotora en el preciso momento que pasaba por una pendiente pronunciada. El tren no avanza, los republicanos aflojan los rieles. El tren corre peligro de descarrilarse. La estación de la historia se divisa en el horizonte… cada vez más lejana.