martes, 26 de mayo de 2009

Aprendiendo a Contar



Sebastian respiraba con dificultad. No era asmático, pero la respiración era
lo primero que le fallaba cuando lo abrumaban los nervios.
Ahora que llevaba en su ser una bala que le había destrozado el hígado, sentía que la tierra se lo tragaba con millones de brazos de fuego.

"Que te paso hijo?"

"Que te han hecho?"

Escuchaba una voz en la distancia. Sentía un cataclismo que le estremecía el
cuerpo con una fuerza descomunal.
La marcha se disolvió, como se disuelve una columna de hormigas aplastadas
por una bota implacable. Sebastian se ahogaba en un grito distinguible solo
por el y para el. Nadie oía nada en el correr de su suerte. Y fue el
silencio.....

Mientras tanto, los grillos mansos eran los únicos que corrompían la quietud
virginal de la noche.

Se le olvido casi todo.

Recordaba solamente una luz distante que lo llamaba desde afuera como
hilitos de plata através de la ventana.

En ese momento en que sentía el frío de la agonía, se acordó también del frío
que solía sentir, al correr sin camisa por el corredor de la casa en las
tardes de diciembre, cuando la algarabía de los petardos saludando la navidad
por adelantado, se confundía con la sentencia ronca de la muerte.


Yacía ahí como un feto nadando en sangre, vencido por el miedo y la
resignación apocalíptica de los que han hecho un trato con la muerte,
convencidos de un pronto anochecer.

Sus padres traían un nuevo bebe a casa... finalmente...

"Donde esta mama?"

"Esta enferma?".

Vio la silueta de su madre atravesar el dintel del crepúsculo de aquella tarde azul y le alentó su sonrisa, mas por alivio que por felicidad.

"Mira hijo es tu hermanito!"

Y al decir esto, su madre deposito en sus brazos de niño a su recién venido hermano en un cartucho de sabanas con muñequitos de colores. El momento quedo indeleble en
su memoria así como la fotografía que su padre se apresuro a tomar.
Sebastian se bifurcaba cubierto por una sombra triangular mientras besaba
un remolino de sabanitas...

Se suspendió el tiempo de una manera casi invisible, casi impalpable. Sebastian no hubiera entendido entonces nada de edades, de días, meses o años. Todo funcionaba dentro un agujero que se cerraba con el tiempo y se resignaba a esperar la oscuridad.

"Pregúntame algo papa", dijo el niño al regresar del parque, aburrido a
causa de su edad. Era muy bajito para subirse por si solo a los columpios y
muy joven para jugar al fútbol con los mayores.

"Que numero es esa casa?", pregunto el padre.

"Dos"!!!

"Ahora...Que numero es esta casa?"

"Cuatro!!!"

Caminaron frente a dos casas sin decir nada. A la siguiente el padre le
formulo la misma pregunta.

"Diez!!!"...Pero no me preguntases ni el seis ni el ocho".

No sabia leer ni escribir y hasta ese momento, ni el ni su padre sabían que ya contaba hasta diez.


"Papa…Que sigue después del diez?"...

En las penumbras de su dolor las imagines se le confundían, como
maripositas blancas revoloteando en la iluminada corola de un bombillo
encendido. La vida se le diluía gota por gota y la música de la noche le
arrullaba el sueño eterno.

"Que te paso hijo?"

"Que te han hecho?"... Su abuela llego del trabajo para atenderle la
hinchazón que le había estallado en el pómulo izquierdo, producto de un
codazo que un compañero le había propinado jugando al fútbol, en su primer
día de escuela.

"Abue ya no quiero ir a ese colegio. Tengo miedo. Me puedo quedar contigo?"


Su abuela que para el era todo le dijo: "No te aflijas hijo ya estoy aquí
contigo"


"Y mañana?"

"Mañana vas de regreso. Acuéstese ya, que cae la noche."

Fue una muerte rápida. Su familia se desmorono colectivamente al momento de
enterarse. La administración del hospital les dijo que debían sacar las
posesiones de Sebastian y desocupar el cuarto, tratando de borrar el rojo
lunar de sus pabellones inmaculados de azul y blanco.

Su abuela fue la única en hallar fuerzas para empacar la vida de su nieto
en unas bolsas indolentes de hospital.
Ya casi al terminar su desafortunada tarea, se dio cuenta que había algo casi
escondido bajo la cama, tirado seguramente durante el desenfreno que se armo
cuando hubo que llevárselo de emergencia al quirófano.

Era el libro de historietas que ella le había regalado a Sebastian en su
sexto cumpleaños. Apartado por un listón manchado por la vida, se
encontraba una pagina del cuento favorito de su nieto que ella leyó con una
voz tenue y melancólica:

"Mc Connell respiraba con dificultad. No era asmático, pero la respiración
era lo primero que le fallaba cuando lo abrumaban los nervios..."

domingo, 10 de mayo de 2009

Por Un Regalo de Salud


No hay cosa mejor que le pueda pasar a un niño o joven que involucrarse en un deporte competitivo, especialmente si se trata de un deporte individual, como la natación, la gimnasia ,el atletismo ,etc.

El deporte forja el carácter, te inyecta cierta dosis de determinación y disciplina, características valiosas en el diario vivir.

En los diarios entrenamientos competís contigo mismo y tus temores, con tus limitaciones, con tu cansancio y cuando ya no podes mas, siempre esta la ultima repetición que hacer, la cual si la haces bien, es la que te catapulta a la próxima frontera.

A los padres de familia que tengan hijos pequeños, les recomiendo que no dejen pasar la oportunidad si la tienen de regalarles a sus hijos un deporte. Todos son buenos, pero yo me inclino por la natación.

De pequeño aun con limitaciones mis padres se preocuparon por darme una educación completa, se que los tiempos han cambiado y estamos en la era cibernética y de los juegos de vídeo. Pero les digo que ningún juego de vídeo se podrá comparar al ver que tu hijo nada 50mts libre en menos de 27 seg.

En fin, hagan todo lo posible por darles a sus hijos,nietos o sobrinos un regalo de salud...

lunes, 4 de mayo de 2009

La Gripe Anti Inmigrante... Engordando Cerdos.


Veo a mí alrededor y solo esta presente la silueta oscura de la soledad que me hace muecas. En el escritorio, una semilla de mango maduro raspada hasta dejarla seca, hace equilibrio sobre un frasco de Lipitor caducado con unas 23 pastillas todavía adentro expiradas por el olvido, el desgano, o la buena voluntad de cuidar el hígado que nos va quedando.

Decidí darme un descanso del blog, no por que no haya nada que escribir, o que contar, o que decir, o que opinar , fue mas bien una tarea de recargar baterías pues las constantes emociones de la contienda política presidencial pasada me dejaron seco. Las ocho neuronas que me van quedando decidieron tomar vacaciones en la Isla de la Fantasía.

Pero ya es tiempo de retomar y quiero comenzar con el tema de la gripe porcina y sus ramificaciones políticas y contra inmigrantes aquí en los USA.

La derecha de este país reconociendo que esta en los niveles más bajos de aceptación popular, esta recurriendo a los habituales métodos de infringir miedo en la población y fomentar el odio para dividir y conquistar. Grupos anti-inmigrantes aliados al partido republicano están a la ofensiva, haciendo de la gripe porcina un arma mas para influir en contra de una reforma migratoria y achacar a los demócratas la inseguridad en las fronteras.

El racista y xenofóbico Michael Savage decía (traducción):

“No hagas contacto con ningún inmigrante ilegal y esto comienza en los restaurantes donde no sabemos si ellos se limpian el trasero con la mano”

“Seria fácil llevar un virus alterado a México, infectar a la población y luego hacerla que cruzaran la frontera”


Otro racista Jay Severin fue suspendido por llamar “criminales” a los inmigrantes mexicanos y acusarlos también de usar las salas de emergencia de los hospitales como sus “condominios”.

Lo que no saben estos idiotas o si lo saben pero deliberadamente ocultan es que el virus fue traído a NY por un grupo de escolares de un colegio católico que fueron de vacaciones a Cancún.

Otra congresista republica dijo la semana pasada que le parecía extraña coincidencia que la ultima epidemia de gripe porcina había comenzado en 1976 en el gobierno de otro demócrata Carter, lo que se le olvido decir o no sabia es que Carter tomo posesión del cargo 1977.

Comentarios como estos pululan los famosos “talk shows” en la radio y la televisión y no solo eso todos básicamente piden que se cierre la frontera queriendo crear el pánico en la población estadounidense.

La única forma de contra atacar a estos racistas xenofóbicos es por medio de la información y la educación de lo que es en realidad la gripe porcina. Informar al público acerca de las masivas dosis de antibióticos para controlar infecciones en los animales que lo único que hacen es fortalecer cada vez más al virus.

Mas de 100,000 personas son hospitalizadas y mas de 20,000 mueren cada año aquí en los USA debido a la influenza (gripe común) cifra que esta íntimamente ligada a la falta de seguro medico de gran parte de la población el cual los republicanos se oponen rotundamente a que sea un seguro universal.

Incentivar al público a que practiquen métodos básicos de prevención como lo son lavarse bien las manos y cubrirse la boca y la nariz al toser o estornudar.

No hay duda que la gripe porcina esta resultando ser un banquete sustancioso para los cerdos de siempre.